Actualmente las regulaciones ambientales exigen reducir la huella de carbono debido al elevado índex de contaminación. Uno de los principales causantes de las emisiones contaminantes son los vehículos que utilizan combustible fósil, no solo por la movilidad de estos coches, sino también por sus procesos de fabricación.
Por este motivo el vehículo eléctrico está entrando con fuerza en el mercado, concretamente se prevé que a partir del 2030 solo se fabriquen este tipo de vehículos.
¿El objetivo? Conseguir ciudades con mejor calidad del aire.
¿Qué papel juega el plástico en la movilidad sostenible?
Debido al gran crecimiento de la demanda de coches eléctricos, se está buscando la forma de optimizarlos al máximo a nivel de sostenibilidad. Uno de los puntos clave a mejorar de estos vehículos es la autonomía, y aquí el plástico juega un papel muy importante.
Los plásticos de ingeniería presentan unas cualidades muy favorables para la automoción. Principalmente, destaca su facilidad para ser moldeables y crear piezas muy concretas, también su resistencia a la oxidación, pero la más importante es su bajo peso.
Actualmente se están remplazando las piezas metálicas de los coches eléctricos por termoplásticos como el Polipropileno para reducir el peso de vehículo y aumentar su autonomía. Con los termoplásticos se puede llegar a reducir hasta un 60% el peso de la pieza, esto supone reducir en un 7% el consumo de combustible. Y no solo esto, ¡sino que las cualidades del plástico también permiten garantizar la resistencia de toda la estructura!
Los plásticos de ingeniería presentan unas cualidades muy favorables para la automoción. Principalmente, destaca su facilidad para ser moldeables y crear piezas muy concretas, también su resistencia a la oxidación, pero la más importante es su bajo peso.
Actualmente se están remplazando las piezas metálicas de los coches eléctricos por termoplásticos como el Polipropileno para reducir el peso de vehículo y aumentar su autonomía. Con los termoplásticos se puede llegar a reducir hasta un 60% el peso de la pieza, esto supone reducir en un 7% el consumo de combustible. Y no solo esto, ¡sino que las cualidades del plástico también permiten garantizar la resistencia de toda la estructura!
Una apuesta aún más sostenible
De cara al futuro, no solo se prevé un crecimiento de más de un 30% en el uso de los plásticos para vehículos eléctricos, sino que también aumenta la utilización de bioplásticos y plásticos reciclados para conseguir reducir aún más el peso del vehículo, y apostar por una fabricación más sostenible.
Si estás interesado/a en piezas de plástico para la automoción, no dudes en contactar con nosotros. Te asesoraremos en todo el proceso de compra.